A veces, una recomendación insistente vale más que mil reseñas. Eso fue lo que me pasó con Hernández: durante meses escuché a gente hablar de este lugar como si se tratara de un secreto bien guardado, pero compartido entre quienes aprecian un buen pastel. Y sí, confieso que tardé en ir. Pero una vez que lo hice, entendí por qué tantos lo mencionaban con una sonrisa.
Hoy te quiero contar por qué este rincón en Oslo se ha vuelto uno de mis lugares favoritos cuando se trata de disfrutar algo rico y bien hecho. Spoiler: no es solo por el cheesecake.
La historia de Hernández también es la de alguien que decidió apostar por su talento en otro país. Diego Gil Hernández dejó Barcelona para traer a Oslo lo mejor de su formación y su gusto por los postres bien hechos. Su proyecto es un ejemplo de cómo muchos españoles en Noruega están construyendo negocios con identidad, calidad y mucho corazón.
Hernández es el proyecto del chef pastelero Diego Gil Hernández, uno de esos emprendedores españoles en Oslo que han logrado crear algo muy propio lejos de casa, según cuentan en su web. Llegó a Noruega desde Barcelona con una idea clara: crear un lugar cálido, honesto y lleno de sabor. Se formó en escuelas reconocidas, y trabajó en varios restaurantes de renombre antes de abrir su propio espacio. En Oslo ha logrado mucho más que una simple pastelería: creó un rincón donde se nota que todo está hecho con cuidado y atención al detalle.
En Oslo ha logrado mucho más que una simple pastelería: creó un rincón donde se nota que todo está hecho con cuidado y atención al detalle.
La primera vez que intenté ir, era lunes… y estaba cerrado. Regresé el martes con las mismas ganas… y otra vez cerrado. Google Maps me confirmó lo que ya sospechaba: no abren ni lunes ni martes.
My bad.
Pero no me rendí. Volví ese sábado, lista para comprobar si el famoso cheesecake valía tanto la pena.
El lugar tiene esa mezcla perfecta de calma y movimiento. Hay gente, pero nunca se siente agitado. Me pedí una rebanada del clásico y pregunté por el chocolate derretido que habían mostrado en Instagram… ya se había agotado. Para mí, eso fue señal clara de que aquí todo vuela porque gusta de verdad.
Acompañé el pastel con una kombucha y estuve tentada de llevarme una bolsa de café, pero decidí dejarlo para la próxima (y así tener una excusa para volver). Desde entonces he repetido varias veces, y siempre salgo igual: contenta. Siempre me quedo con ganas de pedir otra rebanada, y lo confieso, a veces lo hago.
Desde mi visita en julio de 2025, han estado sumando nuevos sabores y productos al menú. Algunos aún no los he probado, pero no pienso quedarme con las ganas. Algunos aún no los he probado, pero no pienso quedarme con las ganas.
Su especialidad es el cheesecake estilo vasco, sin base y con ese toque tostado por fuera que lo hace inconfundible. Puedes pedirlo entero o por rebanada a través de su tienda online o apps como Wolt.
Estas son algunas de las versiones disponibles:
Pasteles enteros:
Rebanadas (en Wolt):
Ubicado en Uelands gate 59K, entre Sagene y Grünerløkka, Hernández tiene ese encanto de los lugares que se disfrutan sin prisa. Con sus mesas de madera, ventanales grandes y una estética sencilla, es ideal para una pausa, una merienda o una charla con alguien querido.
No soy la única que lo recomienda. En redes sociales y guías locales, muchos destacan el sabor, el trato y la calidad constante. Algunos productos desaparecen en pocas horas, lo cual lo dice todo.
Además, ha sido recomendado por entusiastas del café en Oslo y ha aparecido en plataformas locales como Lysløypa, lo que refuerza su lugar como favorito entre quienes buscan calidad en cada detalle. Cuando varios coinciden, es por algo.
Hernández no es solo una pastelería. Es uno de esos lugares que, una vez que pruebas, quieres recomendar. Porque sí, los pasteles están buenísimos. Pero también porque te hace sentir bien estar ahí.
¿Te apetece un buen cheesecake en Oslo? Ya sabes dónde ir.
Y si vas, cuéntame qué probaste. Me encantará saberlo.
P.D. Diego, si estás leyendo esto, ¿te gustaría que pasara un día por Hernández a tomar algunas fotos? Me encantaría capturar la esencia del lugar.
La vida en Noruega puede ser tan emocionante como abrumadora al principio. Hay mucho por aprender y por ajustar, pero no tienes que hacerlo sola. He creado Rumbo59 como un espacio para compartir recursos útiles, aprendizajes reales y herramientas que pueden hacerte el camino más fácil, tanto si estás empezando como si ya llevas un tiempo aquí.
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